Piscinas naturales, aguas cristalinas, ríos, lagos, cascadas y aguas que emergen casi de cualquier lugar… Sigue leyendo y descubre algunos de los saltos de agua más bonitos de Cataluña, una ruta en la que refrescarás todas tus ideas.
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1. Salto de Sallent, el salto más alto de Cataluña
Situado en el municipio de Rupit, en la comarca de Osona, el Salto de Sallent es una impresionante caída libre que te dejará sin habla. Con más de cien metros de altura, cada año se convierte en un auténtico paraíso para amantes del barranquismo. Prepárate para realizar una de las excursiones más espectaculares del territorio. Caminarás entre puentes colgantes, pasarás la fuente de Carraguell, descubrirás la ermita de Sant Joan de Fàbregues, con vistas al pantano de Sau, y finalmente te adentrarás entre cristalinos riachuelos, bosques teñidos de verde y llegarás al salto más alto de todo el territorio.
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2. Saut deth Pish, un paraíso doble
Si hay un solo motivo que hace que el Saut deth Pish, desde hace décadas, sea considerado uno de los saltos más emblemáticos de la Valle de Arán, es ver como desciende el agua entre una impresionante doble cascada. La superior con unos veinte metros de altura, y la inferior con cinco aproximadamente. Increíbles de escuchar una vez en la vida. Iniciarás la ruta en el Plan des Artiguetes, desde donde irás descubriendo, poco a poco, el increíble paisaje de la zona. Te adentrarás en el profundo Bosque de Siesso, repleto de hayas y abetos; te enamorarás del pequeño lago de montaña de Varradós, situado más al norte; te adentrarás en pequeños refugios desde donde podrás ver toda la inmensidad del territorio; y caminarás por extensos prados bordeando el macizo de La Maladeta y el Aneto, el pico más alto de los Pirineos.
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3. Salto de Santa Margarida, una cortina de agua
Escondido en el río Brugent, en la comarca de la Garrotxa, el Salto de Santa Margarida es un pequeño oasis natural donde observarás como el agua fluye por cuevas de piedra basáltica y forma una tela de color azul, creando un clima perfecto para relajarte. Para llegar recorrerás la Vía Verda o Camí del Carrilet, un camino llano y perfectamente aplanado, ideal para hacer a pie o en bicicleta. Desde allí descubrirás pequeños puentes medievales, como el que viene de la antigua Colonia Dusol; cruzarás el Torrent de Can Reixac, nacido en Sierra Marina; te sorprenderás con una ruta que asciende al santuario de la Mare de Déu del Far, en lo alto de un acantilado del Collsacabra; y recuperarás las energías en La Parada del Jonquer a les Planes d’Hostoles, una zona de picnic muy recomendada.
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4. Salto del Molí dels Murris, una de las rutas más refrescantes
Otra parada imprescindible en la comarca de la Garrotxa es el Salto del Molí dels Murris, en la riera de Cogolls, ideal para un buen chapuzón y descubrir un lugar donde la tranquilidad lo invade todo. Prepárate para hacer una ruta sombreada y tranquila, la Ruta del Carrilet, donde dejarás atrás las Planes d'Hostoles y te perderás entre dulces aromas de campos de cultivos. Al llegar ascenderás entre escalinatas naturales, te bañaras en pozas espectaculares y te sumergirás con un fondo brillante a tus pies. Además, por su alta concentración de bicarbonato de calcio, descubrirás peculiares formaciones rocosas llamadas "Els Travertins". Elige bañador, toalla y… prepárate para una ruta que te sorprenderá y te refrescará al mismo tiempo.
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