Madrid es una ciudad monumental. Puedes pasear por sus calles como si se tratase de los pasillos de una galería de arte arquitectónico, ¡y es que Madrid está de exhibición las 24 horas del día! Entre todos sus populares monumentos, algunos han conseguido ser todo un símbolo de la capital española, ¿sabes cuáles son?
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La Puerta de Alcalá
La Puerta de Alcalá es uno de los monumentos más representativos de Madrid. ¿Sabías que es el primer arco de triunfo europeo?, ¡incluso anterior a su famoso vecino parisino! En el año 1778 fue diseñada por el arquitecto italiano Francisco Sabatini, aunque, prácticamente un siglo antes, ya se había construido una primera versión de la Puerta de Alcalá. Esta puerta era un homenaje a la llegada a Madrid de la reina doña Margarita, esposa de Felipe III. Pero se acabó derribando porque el rey Carlos III quiso construir una nueva en su honor, en la plaza de la Independencia (donde se encuentra actualmente). En otros tiempos, Madrid contaba con varias puertas reales que permitían el acceso a la ciudad como la puerta de Guadalajara, Atocha, Toledo… La Puerta de Alcalá se construyó con el fin de recibir a los visitantes que viajaban desde Francia, Cataluña y Aragón. En concreto, su fachada exterior era la que daba la bienvenida a los que venían a la ciudad. ¿Alguna vez te has fijado en que el diseño de cada fachada es diferente? Se dice que sus decoraciones no son las mismas porque Carlos III no supo elegir cuál de los dos diseños que presentó Sabatini le gustaba más, así que ordenó hacer cada uno en un lado.
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La Fuente de la Cibeles
La Fuente de Cibeles es todo un clásico de Madrid, y el lugar de celebración de las victorias del club de fútbol Real Madrid. Fue construida por Ventura Rodríguez, Francisco Gutiérrez y Roberto Michel en 1782, cuando Carlos III quiso decorar el Paseo del Prado con varias fuentes (como la Fuente de Apolo y la de Neptuno). Aparte de su carácter artístico, hubo un tiempo en el que también abastecía de agua a la población y a las caballerías. En 1860, se decidió modificar los tubos para que tomasen la forma de las figuras de un oso y un grifo (animal mitológico mitad águila, mitad león). En 1895, cuando la fuente cambió de lugar al centro de la Plaza Cibeles, se prescindió de estas figuras (que se pueden ver en el Museo de San Isidro). Hoy, la fuente representa un carro arrastrado por leones (los jóvenes Hipómenes y Atalanta). Está presidido por Cibeles (diosa madre que simboliza la tierra y la fecundidad) que, en su mano izquierda, sostiene las llaves de la ciudad. Unos años después de su construcción, se incorporaron las figuras de dos niños semidesnudos (también conocidos como “amorcillos''), uno de ellos derrama agua desde una vasija.
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La estatua del Oso y el Madroño, el Kilómetro Cero y el Reloj de la Casa de Correos
La Puerta del Sol es una de las plazas más emblemáticas de la capital. Ha presenciado momentos clave de la historia española como, por ejemplo, en 1931 cuando el político español Niceto Alcalá-Zamora proclamó la Segunda República Española ante la multitud que se había concentrado en la Puerta del Sol. En esta plaza puedes encontrar monumentos tan importantes como la estatua del Oso y el Madroño, el Kilómetro Cero y el Reloj de la Casa de Correos. Este reloj tiene mucha fama en España porque, desde 1962, sus agujas marcan toda una tradición: las 12 campanadas que inauguran el Año Nuevo. El reloj fue donado por el militar José Rodríguez de Losada y, actualmente, se encuentra en la torre del edificio más antiguo de la plaza. Si quieres llevarte un recuerdo muy simbólico de tu viaje a Madrid, puede que quieras hacerte una foto junto a la placa del Kilómetro Cero, ¡así puedes sentirte en el mismísimo centro del país! Esta placa es del año 1950 e indica el punto de partida del que surgen las carreteras españolas. La estatua del Oso y el Madroño es un icono de la ciudad, que ha sido emblema del escudo de la ciudad desde el siglo XIII. Fue construida por el escultor alicantino Antonio Navarro Santafé en 1967, cuando el ayuntamiento quiso levantar una estatua que representase los principales símbolos de la ciudad: un oso que se apoya sobre un madroño para alcanzar alguno de sus frutos. En Madrid también se han levantado construcciones tan importantes a nivel nacional como el Palacio de Cristal, el Templo de Debod y el Palacio Real. Ninguna foto puede hacer justicia a la belleza de los monumentos madrileños, así que ¿te animas a venir a verlos?
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