Familia en el Parque Nacional del Teide

11 aventuras para vivir en un viaje a España

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¿Buscas adrenalina en tus vacaciones o al menos vivir una experiencia de viaje diferente? En España podemos proponerte varios planes que seguro van a motivarte. Te damos sugerencias relacionadas con deportes más extremos si estás hecho todo un aventurero y otras más suaves, originales e incluso para toda la familia pero con un toque diferente. Sigue los pasos de exploradores y soñadores y asciende hasta lo alto del volcán más alto de España, sumérgete bajo un mar lleno de esculturas, siente una subida de adrenalina haciendo “espeleokayak”, pasa la noche en un castillo con fantasmas o persigue a gigantes acompañado por los más pequeños. ¡A por todas!

  • Tramo del Caminito del Rey, Málaga

    Sentir el vértigo del Caminito del Rey

    Este recorrido, que fue considerado como uno de los más peligrosos del planeta (ahora está habilitado para el turismo), lo encontrarás en el Desfiladero de los Gaitanes, entre los municipios de Álora, Antequera y Ardales (Málaga, Andalucía). Se construyó en 1905 para conectar dos saltos de agua y después recibió el nombre de Caminito del Rey cuando el rey Alfonso XIII lo recorrió. La ruta consiste en bordear las paredes de la montaña por una pasarela con unas impresionantes vistas a una altura de 100 metros sobre el río. Se trata de un recorrido lineal de casi ocho kilómetros y te llevará entre tres y cuatro horas realizarlo. Te recomendamos adquirir previamente las entradas en su web.

  • Basílica de Covadonga en Cangas de Onís, Asturias

    Tener los Picos de Europa y los Pirineos a tus pies

    Son dos de las cordilleras montañosas más impresionantes de España, ambas al norte del país. Vamos a proponerte dos rutas exigentes para conocerlas en las que los paisajes inolvidables están garantizados. Para caer rendido ante los encantos de los Picos de Europa, anímate con la Ruta de la Reconquista, en Asturias, llamada así porque es el camino que hace siglos siguieron las tropas musulmanas tras ser derrotadas. Son casi 60 kilómetros de recorrido plagado de gargantas e imponentes picos que comienzan en Sotres (uno de los pueblos más altos de Asturias) y acaban en Covadonga, zona famosísima por su basílica o por los cercanos lagos de Covadonga (a unos 13 kilómetros). Por otro lado, a lo largo de toda la frontera con Francia se extiende el GR11, la Senda Pirenaica, que atraviesa 800 kilómetros y se divide en casi 50 etapas. Toda una aventura que te llevará desde el mar Cantábrico al Mediterráneo conociendo las leyendas de los pueblos, emocionándote con cumbres imposibles, bosques autóctonos y cañones kársticos o alojándote en caseríos o refugios. Sus dos zonas más especiales son los parques nacionales de Aigüestortes i Estany de Sant Maurici y Ordesa y Monte Perdido.

  • Chica en el Parque Nacional del Teide, Tenerife (Canarias)

    Subir al pico más alto de España… que además es un volcán

    ¿Te apuntas a la experiencia de subir hasta la cumbre del Teide, que con 3.718 metros es la cima más alta de España? La encontrarás en el interior de la isla de Tenerife (islas Canarias). Para vivir esta aventura tienes dos opciones. Por un lado, realizar un duro sendero a pie que parte de Montaña Blanca y que te llevará unas seis horas. Por otro lado, montarte en un teleférico habilitado que sube hasta los 3.555 metros de altitud y después ponerte en marcha por el sendero Telesforo Bravo. Para este último recorrido de unos 600 metros es necesario un permiso. ¿La recompensa? Ya nos contarás cómo de impresionantes son las vistas desde lo más alto de esta isla de origen volcánico con el resto de islas Canarias alrededor.

  • Rafting en el río Gállego, Aragón

    Viajar al “centro de la tierra” y practicar otros deportes extremos

    Vas a tener dónde elegir… ¿Quieres barranquismo? Organiza un viaje al Parque Natural de la Sierra y Cañones de Guara (Aragón) donde numerosas empresas de turismo activo te ayudarán a sortear sus profundas y estrechas gargantas de caliza. Aragón también es buena zona para el rafting en las aguas bravas y espumosas de los ríos Gállego o Ésera. ¿Y qué tal “espeleokayak”? Son famosas, por ejemplo, este tipo de visitas en el interior de les Coves de Sant Josep de la Vall d’Uixó (Castellón, Comunidad Valenciana), donde está uno de los ríos subterráneos navegables más largos de Europa… Será como viajar al centro de la tierra. ¿Te gusta la idea de adentrarte en una cueva? También hay multitud de sitios para practicar espeleología como el curso de aguas de la cueva de Valporquero (en León, Castilla y León), uno de los escasos espeleobarrancos de la Península. Te espera un mundo subterráneo de estalactitas, estalagmitas, ríos y cascadas.

  • Termas de Outariz, Ourense

    Bañarse a la luz de las estrellas o en una bañera de vino

    ¿Te atreves a un baño diferente a cualquiera de los que te hayas dado hasta ahora? Imagina que es noche cerrada. El cielo está plagado de estrellas y te sumerges en una poza de agua caliente que te envuelve en vapor y la naturaleza te rodea. Esto es posible hacerlo realidad en termas al aire libre de la ciudad de Ourense (Galicia) como las de A Chavasqueira, Muíño da Veiga o en Outariz, a orillas del río Miño. ¿Otro bañito original esta vez relacionado con el vino? En zonas de España como La Rioja -alrededor de cuyos famosos vinos se han creado toda una cultura y un modo de vida- cuentan con spas en los que es muy habitual encontrar tratamientos de vinoterapia, individuales o en pareja, que aprovechan los extractos naturales de la uva y el vino. Así que imagina por ejemplo una sesión de bañera de cromoterapia con esencias de vino en el agua y un masaje relajante. ¿Un lugar especial para experimentar todo esto? Laguardia.

  • Cueva de las Brujas en Zugarramurdi, Navarra

    Atreverse a pasar la noche en “territorio de brujas”

    Hay varios pueblos en España que se asocian con antiguos aquelarres de brujas, aunque, en esta ocasión, vamos a recomendarte dos. Por un lado, Trasmoz (Aragón), una localidad vigilada por su antiguo castillo y que cuenta con un museo dedicado a la brujería y a las supersticiones. Sin duda, un lugar mágico al que el poeta Bécquer dedicó algunas de sus cartas. Por otro lado, Zugarramurdi (Navarra) también evoca a tiempos de magia y aquelarres y cuenta con su propio museo de la brujería. No te pierdas su cueva de Zugarramurdi, lugar del que se cuenta que servía de punto de reunión para los encuentros de brujas y donde se celebra el 18 de agosto una fiesta gastronómica.

  • Crossing the Rubicon. Escultura de Jason deCaires Taylor

    Bucear en el único museo de esculturas bajo el agua en Europa

    Nos referimos al Museo Atlántico Lanzarote (islas Canarias), al sur de la isla de Lanzarote, en la bahía de Las Coloradas. Ningún buceador que se precie puede perderse la vivencia de sumergirse entre las impresionantes esculturas creadas por Jason deCaires Taylor a varios metros de profundidad. Todas están realizadas en hormigón de pH neutro y con el paso del tiempo están creando un gran arrecife artificial. Existen diferentes empresas de buceo que te ayudarán a hacer realidad esta actividad con la ayuda de un instructor.

  • Pozo Sotón en San Martín del Rey Aurelio, Asturias

    Ser minero o marinero por un día

    Dos tipos de “aventuras” que te ayudarán a comprender y experimentar dos oficios tradicionales. Empezamos por Asturias, una región conocida por su pasado minero, del que hoy podemos encontrar interesantes huellas. Desde allí nos ofrecen varias experiencias como acercarse hasta el pozo Sotón, un impresionante pozo doble de 550 metros de profundidad donde podrás adentrarte de mano de guías que han sido mineros. ¿Más ideas? Visitar el pueblo de Bustiello para ver cómo era la vida de los mineros en el exterior o el Ecomuseo de Samuño, donde descenderás en tren a 30 metros bajo la tierra. Muy cerquita y también al norte del país, en Galicia, merece la pena convertirse en marinero por un día aprovechando la gran tradición de esta tierra repleta de marisquerías y mesones. Podrás acompañar a los percebeiros (recolectores de este tipo de crustáceo en las rocas donde rompen las olas) en la Costa da Morte, hacer la ruta de los secaderos de congrio en Muxía, vivir el apasionado día a día de un lonja, iniciarte en la pesca deportiva sostenible e incluso cocinar tus propias capturas. ¿Qué tal un curso sobre cómo cocinar el famoso pulpo gallego?

  • Parador de Cardona, Cataluña

    Pasar la noche en un castillo… con fantasmas

    Si has oído hablar de los Paradores de España, sabrás que son alojamientos más allá de lo convencional y que te permiten pasar la noche en espectaculares castillos, palacios y edificios con siglos de historia. Para los más valientes, las leyendas dicen que incluso algunos cuentan con su propio fantasma. ¿Algún ejemplo? En el Parador de Jaén (Andalucía), en el Castillo de Santa Catalina, se dice que el fantasma de “Terrible Lagarto” -antiguo prisionero del castillo- todavía deja verse. En el Parador de Cardona (Barcelona, Cataluña) se comenta que durante un tiempo se movieron los muebles de la habitación 712. O en el Parador de Olite (Navarra) parece que el retrato de un príncipe que cuelga de una de las paredes no permite que una lámpara se apague. Más allá de estas divertidas anécdotas, te van a encantar todos estos emplazamientos… Si te atreves.

  • Molinos en Consuegra, Castilla - La Mancha

    Enfrentarse a gigantes

    Una de las novelas más famosas de todos los tiempos, Don Quijote de la Mancha, escrita por Miguel de Cervantes, nos habla de cómo su personaje protagonista luchaba contra molinos de viento creyendo que eran gigantes. Hoy tú y toda tu familia podéis “jugar” a imitarlo organizando un viaje a Castilla-La Mancha para ver en primera persona esos famosos molinos con siglos de antigüedad. Prueba a hacerlo en lugares como Consuegra o Campo de Criptana para ver la imponente silueta de estos gigantes recortarse contra el horizonte al atardecer. Muchas veces organizan visitas teatralizadas. De hecho, incluso podéis organizar una gran ruta siguiendo todos los pasos de Don Quijote por España.

  • Faro de Cavalleria en la ruta de Cavalls, Menorca

    Rodear una isla a pie o a caballo

    Nos referimos al Camí de Cavalls (camino de caballos), en Menorca (Islas Baleares). Es un recorrido de casi 200 kilómetros que rodea la costa y se dice que su origen está en la constante circulación de soldados británicos que vigilaban a caballo en tiempos de la dominación inglesa. Se puede recorrer al completo o bien realizar alguna de las 20 etapas en las que se divide. Resulta maravilloso ir atravesando barrancos y bosques, y viendo el atardecer en un sinfín de calas. También hay empresas que organizan excursiones a caballo por horas, de un día entero o bien de varios días por este itinerario. ¿Te apuntas a esta aventura?

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