La ciudad de Madrid tiene a menos de 100 kilómetros numerosas opciones para disfrutar de la naturaleza todo el año. Estos cuatro planes son perfectos para desconectar del ritmo de la ciudad y pasar un día en contacto con la naturaleza en lugares como la Sierra Oeste o el Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama.
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4Entre pueblos con encanto de la sierra
Torrelaguna, Patones, Buitrago de Lozoya o Rascafría son algunos de los pueblos de la Sierra Norte de Madrid más populares. Se sitúan en plena naturaleza y conservan su encanto rural con pequeñas calles que se abren paso hasta llegar a su plaza mayor, con casas de arquitectura típica, fantásticas vistas a bosques y a la sierra y, en general, una amplia oferta gastronómica para saborear la cocina popular más madrileña. La Sierra Norte de Madrid forma parte del Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama y estos pueblos se encuentran a una distancia de la ciudad de Madrid de entre 65 y 100 kilómetros. Un buen plan puede ser visitar al menos dos de ellos en una jornada o combinarlos con alguna ruta senderista en un plan de fin de semana por lugares como los valles del Lozoya o de Angostura.
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4El hayedo de Madrid
Se trata del Hayedo de Montejo y forma parte de los bosques de hayas declarados Patrimonio Mundial por la UNESCO. Es especialmente bonito en otoño, cuando aparecen los colores ocres, marrones y anaranjados, pero recorrer sus sendas y pueblos como La Hiruela, Montejo de la Sierra, Horcajuelo de la Sierra, Prádena del Rincón y Puebla de la Sierra es agradable todo el año. Ten en cuenta que para recorrer el hayedo es necesario reservar con antelación.
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4Actividades organizadas al aire libre
Las empresas de la sierra de Madrid organizan numerosas actividades. Podrás elegir desde la observación de fauna salvaje como el lobo o el buitre leonado hasta aprender sobre las abejas y su producción de miel visitando granjas de apicultura. Podrás también montar a caballo o pasear en burro, participar en talleres de elaboración de quesos y panes, probar cervezas artesanales o salir en busca de setas por el monte. Incluso, se organizan noches para ver las estrellas o días junto a un pastor para ver su trabajo con las cabras. Puedes infórmate directamente en cada centro de visitantes, en las oficinas de turismo y a través de Turismo de la Comunidad de Madrid.
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4Las rutas senderistas más populares
Son muchos los senderos señalizados de la Comunidad Madrid, como los caminos naturales, las vías verdes (antiguas líneas ferroviarias recuperadas como rutas ciclistas o senderistas), la red de sendas, las vías pecuarias (itinerarios que habitualmente se empleaban para el pasto de los ganados). Puedes consultarlos en su web. Estas son algunas de las rutas más populares: Ruta de los chorros del Manzanares y la Charca Verde (también conocida como ruta de La Pedriza): es cómoda, su recorrido es circular y se puede hacer en menos de cinco horas. El trayecto se inicia próximo a Manzanares el Real y en gran parte se hace junto al río. Incluye varios saltos de agua y es fácil ver fauna como la cabra montés. Esta zona es la puerta de entrada al Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama. Senda del Agua: se inicia en el municipio de Cercedilla, en la Sierra de Guadarrama. También es una ruta apta para todos los públicos, sencilla y tiene una extensión de alrededor de diez kilómetros (ida y vuelta). Lo mejor son sus vistas al valle o al puerto de la Fuenfría. Ruta ecológica de Canencia: un recorrido cómodo y circular de alrededor de dos horas y que posee una de las áreas recreativas al aire libre más populares de la región. Lo más llamativo de la ruta es su variada vegetación, la visita a la Chorrera de Mojonave y las vistas desde el Mirador del Norte. Ruta de Peñalara: el macizo de Peñalara es el punto más alto de la región y su recorrido de unos cinco kilómetros es exigente. En él, se desvelan algunos de los mejores restos glaciares del Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama. Un buen ejemplo es la Laguna Grande, de muy fácil acceso. Además, hay otras rutas muy próximas que descubren paisajes peculiares. Por ejemplo, en Valdepeñas de la Sierra (en Guadalajara, a menos de 90 kilómetros de Madrid) se encuentra la ruta de las cárcavas. Éstas son unas curiosas formaciones rojizas que dan lugar a las llamadas chimeneas de hadas (extrañas columnas naturales originadas a partir de la erosión). Mientras, en Buendía (en Cuenca, a unos 130 kilómetros de Madrid) existe una ruta única y que encanta a los pequeños. Es la ruta de las caras, conocida así porque en las rocas y desfiladeros del trayecto hay esculpidas sorprendentes caras de formas y tamaños diferentes.
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