Parque Nacional de Sierra Nevada

Qúe vas a encontrar

Más de 15 montañas por encima de los 3.000 metros de altura –entre ellos el Mulhacén, pico más alto de la Península Ibérica- te dan la bienvenida a Sierra Nevada. Ríos, riachuelos y manantiales brotan por todos los rincones del parque dando paso a los variados pisos climáticos que aquí existen. En los niveles más bajos descubrirás prados y, a medida que asciendes, aparecen sus encinares y sus pinares, que se extienden hasta los más de 2.000 metros de altura. Más arriba, donde se alzan las solitarias cumbres, sólo los arbustos y los matorrales aguantan el embate de una inclemente climatología, donde viento, agua y frío organizan el ecosistema. Entre toda esta flora, la fauna halla un refugio perfecto donde vivir y alimentarse. Aquí coexisten mamíferos, como la cabra montesa o el jabalí, con otros más pequeños como el tejón o la jineta. Además de numerosos ejemplos de avifauna que anida en la región, como el águila real, la alondra o el buitre leonado. Junto a ellos también surgen infinidad de insectos, muchos de los cuales sólo habitan en el parque, creando así un ecosistema realmente completo.

Itinerarios por el Parque

La mejor forma de recorrer Sierra Nevada es a pie porque son numerosos los senderos y caminos que aquí se abren. Oficialmente hay 25 senderos a pie señalizados de dificultad y longitud variable. Además, los amantes de la bicicleta disponen de 13 rutas habilitadas para ellos, por lo que sólo tienes que decidir de qué manera quieres descubrir Sierra Nevada. Sin embargo, es preferible que antes de tu viaje eches un vistazo a los caminos que más se adaptan a tus condiciones, debido a las diferentes alturas y distancias que aquí te esperan. Es recomendable llegar en coche a Sierra Nevada porque así podrás moverte entre los distintos pueblos que bordean o se encuentra dentro del parque. Mapa del Parque Nacional de Sierra Nevada

No te vayas de la zona sin...

Conocer la Alpujarra. Las duras condiciones de vida de la alta montaña han condicionado la existencia de sus habitantes durante siglos. Sin embargo, en la Alpujarra se encontraron fértiles tierras y abundante agua para convertirla en una región muy productiva. Entre sus numerosos manantiales y desfiladeros descubrirás algunos bellos pueblos, como los que se asoman al Barranco del Poqueira. Situado entre los pueblos de Bubión, Capileira y Pampaneira, la panorámica de este valle es una de las postales más impresionantes de Sierra Nevada. Es difícil resistirse a la tentación de esquiar o disfrutar de la nieve si descubres el parque en invierno. Más de 100 kilómetros de pistas te esperan aquí para sorprenderte con sus vistas (en días claros podrás ver incluso Marruecos). Todo ello combinado con el sol y la luz de Andalucía. Además, en esta zona que ha sido testigo del paso de numerosas culturas, como la judía, la musulmana y la cristiana, son muchos los vestigios históricos que aguardan. Empápate de historia en lugares tan icónicos como el Puente de Tablate, puerta de entrada a la Alpujarra; o del castillo de Lanjarón, situado en un imponente cerro desde el que se domina todo el valle y que te trasladará en un auténtico viaje en el tiempo.