Parque Nacional de Cabañeros

Qúe vas a encontrar

Cada estación tiene un plan para ti en Cabañeros. No importa que lo quieras visitar en otoño, cuando la hoja del roble empieza a amarillear, o en primavera, cuando los campos se visten de verde. El parque se convierte en cualquier época del año en un destino idílico donde sentir la llamada de la naturaleza. Dividido en dos zonas bien diferenciadas: la raña y la sierra, Cabañeros se caracteriza por la variedad de paisajes. En la primera abunda la vegetación herbácea y prolifera la encina, donde pastorean los venados y las aves de llanura como la cigüeña o la avutarda habitan. La segunda, amplios roquedales y pedrizas, se convierte en el hogar de buitres negros, águilas imperiales y en lugar de cobijo para los grandes mamíferos. Allí, entre piedras, aparecen los robles pero también elementos de monte bajo como el brezo y la jara que representan la variedad paisajística de este territorio único. Todo ello sirve como refugio a los grandes mamíferos del parque.  Además, numerosos arroyos y riachuelos fluyen por Cabañeros. Estos cursos de agua llevan su mayor caudal en otoño y primavera, convirtiendo ésta en un mosaico de flores que te cautivará nada más llegar.

Itinerarios por el Parque

Hay 16 rutas que puedes recorrer a pie y que podrás consultar en los puntos de información. No son especialmente exigentes pero sí conviene tener en cuenta que es mejor evitar, en los meses más calurosos, las horas centrales del día. También se organizan distintas visitas en 4x4. Durante su recorrido se realizan varias paradas en miradores y observatorios.  Otras opciones te permitirán conocer dos de sus rutas en bicicleta o, si lo contratas antes previamente, hacer un recorrido a caballo por algunas de ellas. Mapa del Parque Nacional de Cabañeros

No te vayas de la zona sin...

Hacer una parada para probar la gastronomía local. Gachas y migas son excelentes opciones para saborear la cocina de esta región castellano-manchega. En cualquiera de los seis pueblos que comprenden el parque encontrarás restaurantes típicos en los que degustar estas especialidades de origen pastoril. También podrás conocer de primera mano cómo era la vida en la zona en el pasado. Dos Museos Etnográficos, en Alcoba y Horcajo de los Montes, son el lugar ideal para ver la evolución de esta región durante los últimos dos siglos y cómo ha sido el papel que Cabañeros ha desarrollado aquí. Para amantes de la astronomía, otro plan que no puede faltar es el de contemplar sus noches estrelladas. Principalmente en primavera y verano varias zonas del parque se convierten en estupendos observatorios desde los que descubrir el limpio cielo que aquí te espera.