Esta población es la capital de la isla, ya que en ella se localiza el Ayuntamiento de Formentera.
A sólo 3 kilómetros del puerto de Formentera se encuentra Sant Francesc. En esta localidad de carácter marinero, acogedora y tranquila, destaca su iglesia parroquial, una antigua fortaleza construida a principios del siglo XVIII que servía para protegerse de las frecuentes incursiones piratas que sufría la isla. Si desea conocer algo más acerca de sus costumbres y tradiciones, no dude en visitar su Museo Etnológico, donde además podrá disfrutar de una degustación gastronómica y una exhibición folclórica. Echar un vistazo al mercadillo de artesanía y a los puestos hippies que se colocan en el Paseo también le resultará muy interesante. Bisutería, ropa o artículos de lana hechos a mano son algunos de los objetos que se podrá llevar como recuerdo.