Este bello núcleo urbano, declarado Bien de Interés Cultural, se encuentra en medio del Parque Natural de los Arribes del Duero, en una elevación, a 64 kilómetros de la ciudad de Zamora.
Su privilegiada ubicación proporciona una vista espectacular de los verdes paisajes de los Arribes del Duero. Destaca, especialmente, por su arquitectura popular, muy bien conservada. A lo largo de sus calles empinadas y sinuosas se van descubriendo las casonas antiguas, de aspecto robusto y con escudos, o los rincones más pintorescos de la localidad como, por ejemplo, el arco de acceso a la zona del castillo o las calles del Torrejón o del Nogal. Del castillo de Doña Urraca quedan los restos de algunos muros. La Iglesia de la Asunción es uno de los monumentos más interesantes: aunque tiene características góticas, conserva varias portadas románicas con capiteles singulares. También hay que mencionar las ermitas de Santa Colomba, la Soledad, Santa Cruz y San Albín. Otra curiosidad son las bodegas subterráneas que existen en la localidad, algunas de las cuales pueden ser visitadas. Además, los amantes del senderismo hallarán varias rutas que les permitirán conocer el entorno del parque natural.
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