En las Rías Baixas, basta recorrer una distancia de seis kilómetros desde la ciudad de Pontevedra para encontrar el pueblo de Combarro.
El casco antiguo de Combarro, declarado Bien de Interés Cultural, constituye una muestra representativa de tres elementos arquitectónicos tradicionales de Galicia: los hórreos, las casas marineras y los cruceros.
En la plaza de San Roque descubrirá el edificio de la biblioteca, del siglo XVIII, y dos de los cruceros de la localidad. Los cruceros de Combarro, situados normalmente en plazas o cruces de calles, cuentan con una peculiaridad: la figura de la Virgen suele mirar siempre al mar y la del Cristo hacia tierra. Siguiendo por la calle de San Roque se accede a la calle A Rúa, donde se encuentran las tradicionales casas marineras, de estrechos soportales y balcones construidos en piedra o en madera, según fuera la economía del propietario.
Para ver los emblemáticos hórreos puedes dirigirte a la zona costera: es ahí donde se ubica una treintena de los cerca de 60 que se conservan en Combarro. Servían para almacenar alimentos y la mayoría datan de los siglos XVIII y XIX. Al Peirao, el antiguo puerto de pescadores, se puede llegar caminando por las calles de la localidad, o bien, cruzando la playa de Padrón cuando la marea está baja.
Como es habitual en las poblaciones marineras, el 16 de julio Combarro celebra la festividad de la Virgen del Carmen. La tradición manda engalanar los barcos con flores y banderas, para participar en una emotiva procesión marítima; la embarcación mejor adornada es la que portará la imagen de la Virgen. La Fiesta del Mejillón, el 15 de agosto, es otra cita señalada en la localidad.