Importante puerto pesquero y centro turístico de la Costa del Azahar, Benicarló une a su larga playa un casco urbano medieval repleto de muestras notables de arquitectura señorial.
Surgido en la Edad Media como un pequeño núcleo árabe, Benicarló ha conservado intacto su trazado original y destaca por el abundante número de casas que exhiben escudo nobiliario en sus fachadas. En pleno corazón de la villa se alza la iglesia de Sant Bertomeu, templo barroco que exhibe una hermosa fachada labrada en piedra con columnas salomónicas. En su interior se puede visitar el Museo Parroquial, que alberga interesantes obras de estilo gótico. Muy cerca, en una colina cercana, se erige la ermita de Sant Gregori, escenario cada 9 de mayo de una popular romería. Benicarló muestra sus raíces marineras en su activo puerto pesquero, junto al cual se sitúa una playa que se extiende hasta la vecina localidad de Peñíscola y que, sin duda, es uno de los principales atractivos turísticos de la ciudad. Tampoco hay que olvidar su larga tradición agrícola, destacando los cultivos de naranja y alcachofa.