Vacaciones con olor a sal: algunos de los pueblos pesqueros de España para desconectar

Situado en la zona oriental del Principado de Asturias, la villa de Lastres, declarada Conjunto Histórico Artístico, recibió en 2010 el premio Pueblo Ejemplar debido a su patrimonio natural y valor histórico.Uno de los lugares más reconocidos es su puerto de pescadores, donde se amarran decenas de barquitas de colores y dos impresionantes cañones defienden la bahía. Una bahía que te sorprenderá con una playa de aguas mansas y transparentes. Una tranquilidad que te invita a refrescarte y a observar, desde la arena, el casco histórico del pueblo.

En el norte de la península encontrarás Galicia. Un territorio conocido por el Camino de Santiago, su gastronomía y sus bosques verdes, pero también por su costa. El pueblo marinero de Combarro, muy cerca de Pontevedra, forma parte de lo que se conoce como Rías Baixas —en la costa oeste de la comunidad autónoma. Pero lo más característico de este lugar son los hórreos, pero ¿qué son exactamente? Vienen a ser construcciones elevadas para conservar los alimentos de la humedad y mantenerlos alejados de los animales.Combarro cuenta con más de 30 y conforman un bonito paseo para conocer más sobre este tipo de casonas. Es tan especial que el casco antiguo fue declarado Bien de Interés Cultural. Tendrás ganas de dejarlo todo y dedicarte a zarpar los mares. 

Hay más pueblos en la isla, pero el de Tabarca aún conserva la esencia de personalidad pescadora en sus casas. ¿Sabías que hace mucho se conocía como Planesia? Por entonces, los piratas berberiscos aprovechaban este punto estratégico para sus saqueos. Y por si aún no has tenido suficiente... y te apetece conocer otros de los mejores pueblos pesqueros de España, descubre Fornells, en las Islas Baleares; Cudillero, en Asturias; Nerja, en Andalucía; o Mundaka, en Vizcaya. Enamoran a los ojos de cualquiera.