Muchos destinos de España han acondicionado su patrimonio cultural con el fin de ofrecer una experiencia de calidad a todas las personas. Rutas y accesos adaptados, guías y planos en braille, explicaciones en lenguaje de signos o actividades diseñadas con atención a la diversidad. Atractivos culturales como el Museo Nacional del Prado o el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía en Madrid, La Pedrera o la Fundació Miró en Barcelona, La Alhambra en Granada o la Catedral de Santiago de Compostela, están preparados para recibir a visitantes con algún tipo de discapacidad. Especial mención merece la ciudad de Vigo y su denominada milla de oro del arte, con varios museos, salas de exposiciones y centros culturales en su recorrido. Y es que ha sido elegida entre las cinco ciudades más accesibles de Europa, según la Comisión Europea, por su “innovadora arquitectura en una topografía totalmente desafiante”.
