Semana Santa de Orihuela

Espectacular, participativa y de una riqueza artística extraordinaria, gracias a algunas tallas de escultores como Salzillo. Así es la Semana Santa de Orihuela, en Alicante, cuyos orígenes se remontan al siglo XVI.

De entre sus numerosos actos, sobresale la Procesión del Silencio, la noche del Viernes Santo, a la que acuden más de 10.000 personas. Este desfile recorre el casco antiguo del pueblo, y en él sólo se escuchan el ruido y las pisadas de los penitentes, mientras la única luz que ilumina la oscuridad es la que proviene de los faroles de los asistentes. Asimismo, un canto que se remonta al siglo XVIII, el Canto de la Pasión, rompe el silencio de la noche al paso del Cristo. El contraste llega con la procesión del Sábado Santo por la mañana, conocida como la del Caballero Cubierto: sólo una persona, gracias a una bula papal, puede llevar sombrero dentro de la iglesia. Toda una tradición que aún hoy sigue viva en Orihuela.